La playa de La Caleta es una pequeña cala situada al este del Puerto de Tarifa, de carácter familiar, en la que es normal dar los buenos días y las buenas tardes debido a que suelen ser habituales en ella las mismas personas.
La Playa de la Caleta de Tarifa tiene poca extensión, pero es una calita muy acogedora, mezcla de arena y roca moldeada década tras década por la erosión del aire y el agua.
Una playa con carisma en Tarifa
Está bañada por las aguas del mar Mediterráneo, que siglos atrás sirvieron como lugar en el que varaban los barcos pesqueros y fondeaban los buques mercantes, ya que era un lugar protegido de los vientos gracias a su orografía.
La Caleta está muy cerca del casco antiguo de Tarifa, bajando desde el Miramar por el Paseo Marítimo a pocos minutos andando a través de un camino no muy bueno rodeado de chumberas. Al llegar, según el estado de la marea, encontraremos más o menos anchura de playa aunque la plataforma de abrasión (digna de ver) suaviza bastante en ella el efecto que provocan las mareas y las corrientes. Lo único que quizás altera un poco su tranquilidad es la llegada de barcos al puerto, que con sus olas hacen aumentar la actividad del mar en la orilla.
Como parte del paisaje de La Caleta podemos ver varias construcciones en estado ruinoso entre las que destaca la Casa de Salvamento de Náufragos, construida por Orden Real a principios del siglo XX a los pies del cerro del Camorro. A ella, tras la Guerra Civil, se añadió como parte del sistema de defensa del estrecho de Gibraltar un nido o búnker conocido como batería de Camorro Bajo.
En la actualidad la playa sirve como refugio para quienes no perdonan el hecho de respirar el mar en días de levante y para aquellos que encuentran entre sus cantos un lugar de reflexión, un lugar que les aísle de la Tarifa moderna y les haga recordar grandes momentos allí vividos.
Muy recomendada su visita y por supuesto su disfrute.